Éste Grupo Político
sabe y acepta que, tanto en la acción de gobierno como de oposición,
pueden existir errores y fallos. Es humano y, por ello, comprensible
y excusable e, incluso evaluable por los ciudadanos en cada proceso
electoral. Lo que no comprendemos, y no vamos a aceptar ni excusar
jamás, es la pretensión de justificar tales errores, muchas veces
injustificables, desde la mentira más infumable vertida ante unos
micrófonos sin demasiada o ninguna autocrítica; desde la
consideración, en definitiva, del ciudadano como tonto de capirote,
lo que reviste a la acción de quien se pretende justificar en
INDIGNIDAD en el ejercicio del poder.
El problema, Alcaldesa,
no es que usted misma valore el agua de Segovia como el segundo peor
de los que probó en la cata de agua que, para su mayor gloria, se
montó -aunque luego salió rana-. Esto es un problema en sí mismo
-el nivel de calidad del agua que bebemos- y que cuenta con
la aprobación y participación del Partido “Cómplices de
Socialistas” (Vistas las últimas actuaciones de “C´s” ya
sabemos que éste debe ser el significado de tales siglas, por lo
menos en Segovia).
No le gusta a usted
-claro que usted bebe y paga el agua de La Lastrilla-; pero lo grave
es la excusa: “me he tomado un caramelo de limón”. Como si
fuéramos tontos. Le puedo asegurar que muy pocos segovianos toman un
caramelo de limón antes de beber agua del grifo y piensan lo mismo
que usted después de tomarse el caramelo.
El problema, Alcaldesa,
no es que usted diga en una televisión nacional que “yo he llegado
y me he encontrado un edificio a medio construir” o “ yo me
encontré con un problema”, refiriéndose, en todo momento al CAT,
el CIDE o como ustedes quieran llamarlo, mintiendo al ocultar que
éste proyecto se inició y desarrolló bajo los distintos equipos
de Gobierno en los que usted fue pieza esencial, de tal forma que, si
heredó su actual puesto fue por ello.
El problema es que usted,
con el apoyo del partido “Cómplices de Socialistas”, “C´s”,
ha considerado que todos los ciudadanos de Segovia somos tontos del
todo al pretender excusarse en la mentira más palmaria que nunca se
ha escuchado a un político en Segovia, creyendo, sin duda, que los
segovianos además de tontos no tenemos memoria.
Lo grave es que usted,
con el apoyo del partido “Cómplices de Socialistas”, “C´s”,
oculte e impida saber lo que ha pasado en el CAT, desde el pago de
los proyectos iniciales hasta hoy. Claro que usted vive en La
Lastrilla y no paga lo que pagamos todos los segovianos. Incluso a
usted por su trabajo.
El problema de que los
integrantes de su equipo de Gobierno hayan, sistemáticamente,
aceptado la mentira como discurso político –a modo de ejemplo, el
concejal Bayón y el CAT, el concejal Reguera y la Policía
Municipal, la concejal Delgado y la RPT o el concejal Torquemada y la
Fundación CAJA SEGOVIA-, no es perverso en sí mismo sino que lo
empeora el que usted refrende todas las mentiras creyendo que el
ciudadano segoviano es tonto.
Pero, sinceramente, creo
que realmente ese no es el problema de fondo. El problema de fondo es
que su equipo de Gobierno, con la colaboración imprescindible del
partido “Cómplices de Socialistas”, mantiene en la Alcaldía a
una persona que nos toma a todos por tontos y ni tan siquiera padece
sus propias políticas, al residir en La Lastrilla, único signo de
inteligencia política que, hasta ahora, ha demostrado; que huye de
rendir cuentas y que ha hecho de la ausencia de transparencia su
código político.
Por ello, Alcaldesa, me
atrevo a pedirle DIGNIDAD en el gobierno, no nos tome por tontos y
haga de su mandato algo que si no es transparente, al menos, se pueda
investigar, sometiéndolo al control de la ciudadanía a través de
los grupos Municipales de la oposición. (En ésta oposición no me
atrevería a incluir al partido “Cómplices de Socialistas”,
“C´s”).
Y, por último, un
consejo, si me lo permite: Guárdese del partido “Cómplices de
Socialistas”, “C´s”, y sus representantes en el Ayuntamiento,
como César de los Idus de Marzo, no por usted, sino por el bien de
Segovia.